Es muy importante tener nuestros útiles de costura bien conservados, pues nos facilitarán mucho la tarea a la hora de crear. Sin embargo, al final siempre acabamos encontrándonos con que alguno de nuestros preciados instrumentos tiene algún defecto provocado por el uso. En numerosas ocasiones hay arreglo, así que no desesperéis.
Por ejemplo, un clásico es que las tijeras empiezan a mostrar zonas con óxido. En este caso, las soluciones son variadas, sencillas y económicas.
Hay varios trucos para eliminar el óxido de las tijeras:
- Frotar con media cebolla la parte oxidada. Finaliza el proceso pasando un paño seco por la zona hasta que quede bien seca.
- Otra solución es sumergir las tijeras durante una hora en un vaso con Coca-Cola
- También podéis impregnar aguarrás en un estropajo de aluminio y frotar con él la hoja oxidada
Con estos trucos probablemente consigáis retirar el óxido de vuestras tijeras y que estas puedan volver a daros tantos buenos cortes de patrones y tejidos como siempre.
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